¿Ya?
Angkor
dormido en su profunda selva,
Chartres
de luz extática y divina,
esa
otra catedral de Palestrina,
Volver
y Cuesta abajo y Madreselva,
el
ruiseñor de Keats, la enajenada
canción
de Gretchen arrullando al hijo,
el
libro insomne en que Jesús nos dijo:
“no
he venido a traer paz, sino espada”,
el
libro capital donde el proyecto
vive
de un mundo nuevo y de otro modo,
dudoso
Hamlet y Macbeth abyecto,
Bach
y Beethoven y los Beatles... Todo
cuanto
has fraguado, mi antropoide erecto,
¿habrá,
tan pronto, de envidiar al lodo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario