Confesión
Si
tú supieras lo difícil que es caminar por este sendero
que
no tiene atajos,
sin
más opción que seguir adelante
hasta
el último de tus confusos pasos,
donde
a tu llegada las luces estarán apagadas
y no
existe nadie dispuesto a perder el tiempo
para
encender un candil que te guíe.
Donde
a nadie le interese conocerte o saber cómo estuvo tu día,
donde
el tiempo, trabajo y dinero valdrán más que tu salud,
este
lugar donde a Caronte puedes considerarlo un amigo
y
pedirle a crédito el favor de la liberación.
Si
supieras eso, hermano, no querrías seguirme a
este valle
porque
sabrías que dos criaturas agonizantes serán un problema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario