miércoles, 26 de enero de 2022

WALDINA MEJÍA

 

 

 

La muerte verdadera

 

 

Endurecí mis ojos para que ya no vieran 
más pobreza
acallé mis oídos para que ya no oyeran
más dolor
mutilé mi esperanza para que ya no hablara
más Justicia
emparedé mi alma para que ya no amara
la Verdad
y cuando así maté lo más hermoso
me hice duro caucho
que no sonrió, no amó, ni siquiera lloró
mi propia muerte
porque la merecía
para siempre. 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario