sábado, 16 de octubre de 2021

ROBERTO ARIZMENDI

 

  

Sabio presagio de tu enigma

 


He de saber por ti

lo que en verdad te nombre,

lo que deba decir el viento sin palabra

o lo que el mar infinito te describa.

Nada de ti adivinaré más nunca.

Sólo tendré la precisión del canto, cuando cantes

y el exacto escrutinio de tus pasos

cuando a tiempo describas el sendero.

 

En el sueño andaré buscando tus colores

para entender el tiempo de tu tiempo,

el agua que emerge de tu fuente

y el sabio presagio de tu enigma.

 

Nunca caeré en la seducción de adivinarte

para no restregar la historia con profetas,

sólo tu voz delineará las noches cardinales

y tu tacto señalará mi geografía.

El desierto infinito y la playa sin dominio

serán santo y seña de tu nombre;

el exacto valor de esencia y pensamiento

que te precisan sin condición de tiempo ni osadía.

 

La certeza de mi historia limitará el augurio

para no caer en la seducción del pronóstico irrestricto.

Tu sola palabra delimitará mi sombra

y será mi esencia producto de tu amor y tu embeleso.

 

De: “Sabio presagio de tu enigma”

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario