Ave María
La
Solidaridad Social te salve, María. Llena eres de desgracia.
El Señor no está contigo; los señores, tampoco.
Maldita tú eres entre todas las mujeres y maldito es el fruto de
tu vientre.
Yo te bendigo y bendigo a tu hijo.
Nunca reces, María, una oración que diga tonterías sin ton ni
son.
Santa María, madre de la vida, hermana del placer y del dolor,
hija de tus padres, olvido de Dios.
Pasa de nosotros, machistas recalcitrantes, ahora y en la hora
de nuestra existencia. Amén.
De:
“Vida ávida: Poesía reunida, 1970-2022”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario