Coloquio amoroso
Si
el amor que me tenéis,
Dios
mío, es como el que os tengo,
Decidme:
¿en qué me detengo?
O
Vos, ¿en qué os detenéis?
—Alma,
¿qué quieres de mí?
—Dios
mío, no más que verte.
—Y
¿qué temes más de ti?
—Lo
que más temo es perderte.
Un
alma en Dios escondida
¿qué
tiene que desear,
sino
amar y más amar,
y
en amor toda escondida
tornarte
de nuevo a amar?
Un
amor que ocupe os pido,
Dios
mío, mi alma os tenga,
para
hacer un dulce nido
adonde
más la convenga.
Versión de Louis Ratisbonne
No hay comentarios:
Publicar un comentario